martes, marzo 17, 2009

Cómo cuesta

Cómo cuesta llevar éste letargo
de la agonía de tu amor imaginario
el actual vacío caudal de tus besos
tu ausencia devenida omnipresencia

Cómo cuesta dejar ir a la princesa de tus sueños
que alguna vez besaste / y no soñando
a la musa inspiradora de tus versos
a la rubia de los huracanados tiempos


Cómo cuesta dejar ir a la doncella
sabiendo que la puedes hacer libre
hacer feliz por la noche y por el día
sin ser parásito /siendo simple compañía

Que difícil olvidarse de sus besos
dulces batallas en eternas madrugadas
despertarse abrazado a su cuerpo y a su aroma
despedirse a la mañana de su paz
de su sonrisa /de sus piernas / de su boca

Que difícil es dejar ir. cuando uno siente
que la puede hacer feliz
Cuando está convencido como nunca

Cómo cuesta regresarla
a un lugar en el que tal vez nunca estuvo
a un lugar que parece serle turbio
esquivo y algo tenebroso

Orgulloso (10-09-2003)

Me guarde el orgullo
En el bolsillo de un saco viejo
Que habita hace un par de años
Olvidado en el placard

Me mordí la lengua,
Respire profundo,
Amordacé a mis excusas
El amarillo del semáforo
Me canto precaución

Camine unas cuadras,
A una estrella le pedí algún favor
Un vagabundo me dijo
No estaría yo acá, si hubiese sabido
Presentar un perdón

Levante el tubo de algún teléfono,
Alguien no quiso reconocer mi voz,
Escribí algún e mail
Alguien no quiso reconocer la dirección

Y deje el orgullo
Escondido en aquel saco
Que habita ya hace unos años
En el rincón más absurdo del placard

Respire profundo,
Amordacé mis excusas
Y el amarillo del semáforo
Me canto precaución

El 39 me llevaba,
De la boca a plaza Italia (hasta tu casa)
Y una señora con una sonrisa acaudalada
Me presto una estampita,
Que en su revés me decía,

¨ No me arrepiento de nada
De lo que hecho
Pero sí de muchas cosas
Que he dejado de hacer ¨

Y llegando a la esquina,
Toque algún timbre
Y al ¨ hola ¨ amargado
Le réplique un perdón

No sé si fueron minutos
Horas, días o años
Los que pasamos mirándonos
Diciéndonos todo, sin decir nada


Unos abrazos postergados
Algunos besos románticos
Desvestí mis sentimientos
Y una niña agigantada me los robó

Respire tranquilo
Me olvide las excusas
Y el verde del semáforo
Me canto un alegron

Entrada la madrugada
Busque en el bolsillo del viejo saco
Y halle un orgullo, pero ya no era el mismo
En algún momento, alguien me lo cambio

Puntos cardinales

Al oeste de mi almohada el epitafio sobre las huellas de tus besos, al este el maldito acertijo de pasar las noches conmigo; el re...