Dichoso el momento

Dichoso el momento
En el que quedo inmerso
En el laberinto
que presenta tu cuerpo

Voy feliz deambulando
Como niño inexperto
De tus pies a tu pelo.
Inventando estaciones,
Estacionándome en tu cuello

Decís que tus manos
son grandes, son feas,
que se te notan las venas,
seguro son fuertes
porque tus caricias
me quitan la calma
confirmando mis ganas

Grandioso el silencio
Que hace mi dedo
Al recorrerte la espalda,
Robándole protagonismo
A una risa espontánea

Me hago el perdido
Al acariciarte la panza
Al jugar con tu ombligo
Porque es el trayecto
Que desemboca en tus senos

Dirás que no fuiste beneficiada
Que son algo pequeños
.. nunca quitarás mi algarabía
navegando por ellos

Me perdería siglos
En tu rostro perfecto
Tus besos furtivos
Entre tus ojos carismáticos,
Tus mejillas gastadas,
Tus orejas sensibles,
Tu nariz enrojecida
Tu boca deseada,

Tus abusos no tan abusadores
Mi indignación que tiene raíz no sé bien donde
mi mano escapándole a la luz del sol,
a las horas las va devorando el deseo
y dormir nunca resultó tan complejo

Dichoso el momento
En que el quedo inmerso
En el envase que guarda
Tus palabras, tus sentimientos
Tus recuerdos, tus ganas

Dichoso el momento
En que el quedo inmerso
En el envase que protege
La fragilidad de tu alma
Porque es de ella
Que la mía parece q se esta enamorando